Puertas abiertas - Pastor Andrés Corson - 25 Mayo 2014

Puertas abiertas - Pastor Andrés Corson - 25 Mayo 2014

El pastor Andrés Corson empieza su prédica describiendo aquel que fue el peor día de su vida. Ocurrió en lunes 23 de marzo de 1992. Escucha esta prédica y sabrás qué sucedió.

Esta experiencia le permitió aprender que la guerra espiritual es una realidad, por eso no debemos tener puertas abiertas.

Otra de las razones por las cuales, él cree que Dios le permitió vivir este momento difícil, fue para experimentar el gozo de la salvación, sentir la libertad que hay en Cristo, pero también, para mostrarle que había puertas abiertas en su vida.

Siempre que nos ocurre algo debemos preguntarnos si es un ataque del enemigo y qué puertas hay abiertas para que su ataque tenga éxito. Debemos identificar cuáles tablones de la cerca que nos protege de los ataques de Satanás están sueltos y arreglarlos antes de hacer guerra espiritual.

El pastor menciona los tres tablones que en ese momento de su vida estaban sueltos y agrega que esa prueba fue necesaria para reconocer las tendencias de su naturaleza humana que podrían haberlo llevarlo a tomar decisiones equivocadas en el presente.

Otra de las razones por las que Dios permitió que pasara por esa situación fue para conocer a su enemigo. Esta es una de las debilidades del cristiano, asegura el pastor, muchos no conocen a Satanás ni su manera de operar. Durante esta experiencia él aprendió a hacer guerra espiritual.

En Lucas 22:31-32, Jesús le dice a Simón: “Simón, Simón, mira que Satanás ha pedido zarandearlos a ustedes como si fueran trigo. Pero yo he orado por ti, para que no falle tu fe. Y tú, cuando te hayas vuelto a mí, fortalece a tus hermanos”.

El enemigo tiene que pedirle permiso a Dios para meterse en nuestra vida.

Cuando encuentra pecado nos acusa (Apocalipsis 12:10)

Sin embargo, al lado del Padre está Jesús defendiéndonos (Colosenses 1:12-14). En la cerca que nos protege dice: “propiedad del cielo”. Por eso, ¿quién nos condenará? (Romanos 8:34)

Jesús nos defiende, pero para que pueda hacerlo tenemos que contarle todos nuestros pecados. Debemos aprovechar el tiempo de gracia para confesar.

No obstante, aun en medio de la prueba, Dios nos acompaña. 1 Corintios 10:13 dice: “Ustedes no han sufrido ninguna tentación que no sea común al género humano. Pero Dios es fiel, y no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que puedan aguantar. Más bien, cuando llegue la tentación, él les dará también una salida a fin de que puedan resistir”.

Santiago 1:12: dice: “Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes lo aman”. Dios bendice al que entiende que la salida de la prueba es el arrepentimiento.

Predicación del 25 Mayo de 2014 en el Auditorio de la Iglesia El Lugar de Su Presencia - Bogotá - Colombia por el Pastor Andrés Corson. #SuPresenciaenInternet